Fin de semana lleno de sorpresas el que íbamos a tener en Cervera. La quinta prueba del nacional de tierra llegaba con algunas novedades importantes, como el estreno del Skoda Fabia de Josep Basols y Xavi Amigo, la emotiva despedida de Juan Carlos Aguado, a los mandos de un Peugeot 208 N5, el estreno del Peugeot 308 N5 de Efrén Llarena y Sara Fernández, o el retorno de Fran Cima y Dani Cué a la tierra, con el Renault Clio N5. Pero la sorpresa más grande iba a venir desde mucho más lejos.
Pocos podíamos imaginar lo que iba a ocurrir este fin de semana en el Rallye de Cervera. La llegada al Campeonato de España de Rallies de Tierra de pilotos del otro lado del “charco” ha sido una constante en los últimos años. Benito Guerra, Ramón Ferreyros, Luciano Bonomi, Martín Navas, Rodrigo Zeballos o Daniel Kinn son algunos de los ejemplos que nos vienen fácilmente a la mente. Pero ninguno de ellos había conseguido cambiar tanto el panorama automovilístico del CERT del modo que lo ha hecho este fin de semana Marco (o Marquito, como le llaman en su país) Bulacia.
Para entender la sorpresa, quizás sea mejor ponernos en antecedentes, y ver que Marquito Bulacia es un “chaval” de 17 años, cuyo copiloto, Fabian Cretu, debía conducir el Skoda Fabia R5 en los enlaces, ya que en España la edad mínima para conducir son los 18 años que cumplirá en octubre. Un rápido vistazo al palmarés del joven piloto boliviano nos deja ver su corta, pero intensa, experiencia nacional, proclamándose campeón de Bolivia en 2016. La pasada campaña de nuevo se impone en varias pruebas de su país, con varias salidas a Italia, donde tras dos accidentes, sube al podio en dos ocasiones.
Ya en 2018, Bulacia se estrena en el Mundial, siendo cuarto en Argentina, en WRC2, lejos de la lucha por el podio, debido a problemas durante las primeras etapas, y una racha de seis abandonos en 9 pruebas disputadas, que incluyen una victoria en el Rallye de Tierra Ciudad de Astorga. También cabe mencionar, que Marco Bulacia ha sido pupilo del, hasta ahora, dominador del CERT, Xevi Pons, con quien ha dado algún curso de pilotaje, según nos confirmaba el propio piloto catalán.
Además, el propio Marco Bulacia se encargaba de confirmar su presencia en el Rallye Princesa de Asturias, que será su primera prueba sobre asfalto, y parece que podría estar presente en el resto de las pruebas del nacional de tierra, para continuar con su formación, que le llevará a correr también el Rallye de Cataluña.
Y llega Cervera
Lo cierto es que llegamos a esta 19ª edición del Rallye de Cervera sin contar mucho con el joven piloto boliviano, y menos en unos tramos como los catalanes, duros, y que no perdonan los errores. Para esta edición, WRC Management había preparado un recorrido muy técnico, aunque sin dejar de lado algunas de las zonas más conocidas de la prueba. Encontrábamos unos tramos con muchas piedras sueltas, y algo más rotos de lo esperado en algunas zonas. Pero si algo había que destacar del tramo C, donde había dos zonas realmente estrechas, en las que los pilotos incluso dudaban que entrasen los coches de competición tras los reconocimientos.
Las sorpresas no iban a tardar en llegar, y es que ya en el primer tramo, Marco Bulacia se hacía con el mejor crono, con 6,5 segundos de ventaja sobre Xevi Pons. Y no se puede decir que el piloto catalán se hubiese quedado dormido, precisamente, puesto que Josep Basols, que era el tercero en discordia, con su nuevo Skoda Fabia R5, se situaba a 33,2 segundos del boliviano, seguido de Jorge del Cid, que cedía 35,5 segundos, y Daniel Alonso, que era quinto, a 37,3. Por detrás, veíamos la lucha de los N5, con Javier Pardo a los mandos de su Suzuki Swift R+ sexto de la general, a 39,9 segundos, mientras que Efrén Llarena en su estreno con el Peugeot 308 N5, se situaba séptimo a 50,9. En el apartado de abandonos, quedaba fuera de carrera José Luís Peláez, que ni siquiera dejaba la zona de asistencia, al detectar una fuga de combustible en el deposito de su vehículo.
El segundo de los tramos, más corto que el primero, servía para confirmar que Marquito Bulacia estaba teniendo un gran ritmo en el estreno del Skoda Fabia R5 adquirido por RaceSeven para la ocasión. El boliviano era de nuevo el más rápido, con Xevi Pons cediendo esta vez 1,9 segundos. Por detrás, Daniel Alonso lograba el tercer mejor crono, a 10,9 segundos de Bulacia, mientras que Josep Basols se dejaba 18,1 segundos, y con ellos cedía el tercer puesto de la general a Alonso, al igual que Jorge del Cid, que caía hasta el quinto lugar, tras ser 20,7 segundos más lento que el líder. La lucha entre los N5 volvía a tener a Javier Pardo en cabeza, con el gallego cediendo 22 segundos respecto a la cabeza de carrera, mientras que Efrén Llarena mejoraba algo su ritmo, quedando ahora a solo 4 segundos de Pardo.
La segunda pasada por los tramos de la mañana arrancaba igual que la primera. Marco Bulacia se hacía con el scratch en el tercer tramo, aumentando su ventaja sobre Xevi Pons en 4,2 segundos. Josep Basols recuperaba la tercera plaza de la general, quedando a 14,7 segundos del mejor crono, mientras que Daniel Alonso caía al cuarto lugar, tras ceder 26,9 segundos respecto al líder. En la lucha entre los N5, Efrén Llarena iba a ser el más rápido en esta ocasión, a 33,2 segundos del mejor crono, con Javier Pardo cediendo 1,3 segundos respecto al burgalés. Pardo superaba en la general a Jorge del Cid, que era séptimo en este tramo a 43,3 segundos del mejor tiempo.
El último tramo de la mañana, iba a ser además el TC Plus, encargado de repartir los primeros puntos del Rallye de Cervera. Allí, Xevi Pons no iba a perdonar, consiguiendo el primer scratch de la jornada, y llevándose los tres primeros puntos del fin de semana. Marco Bulacia era segundo, sin bajar el ritmo, cediendo tan solo 2,1 segundos. Tercero iba a ser Josep Basols, que se dejaba 15,5 segundos respecto al mejor tiempo, pero se afianzaba en el tercer escalón del podio. Por detrás, Efrén Llarena volvía a ser el N5 más rápido, siendo cuarto a 19,6 segundos, seguido por Daniel Alonso, que se dejaba 19,8, y Javier Pardo, que cedía 21 segundos con respecto a Pons. Por su parte, Jorge del Cid veía peligrar su sexto lugar en la general, dejándose 21,4 segundos en este tramo, por lo que Llarena ya estaba a tan solo 8,8 segundos en la general.
Los equipos llegaban así a la asistencia larga del mediodía. Una hora y media en la que lamerse las heridas, y reflexionar sobre como afrontar los cuatro tramos restantes. Marco Bulacia y Fabian Cretu llegaban a la asistencia como líderes de la prueba, con 10,5 segundos de ventaja sobre Xevi Pons y Rodrigo Sanjuán, y 1:19,4 sobre Josep Basols y Xavier Amigo. La cuarta plaza la ocupaban Daniel Alonso y Cándido Carrera, a 1:32,8, mientras que quintos marchaban Javier Pardo y Adrián Pérez a 1:55,3. El sexto lugar era para Jorge del Cid y Nerea Odriozola, que se situaban a 1:58,8 del líder, mientras que séptimos eran Efrén Llarena y Sara Fernández, a 2:07,6. El octavo puesto de la general lo ocupaban Juan Carlos Quintana y Rogelio Peñate, a 3:00,9, mientras que novenos eran Albert Orriols y Lluis Pujolar a 3:28,9, con Eduard Fores y David Usón completando el top ten a 3:30,9.
Y tras reflexionar sobre como afrontar los tramos de la tarde, Xevi Pons nos comentaba que a pesar de que le daba rabia, por ser el rallye de casa, prefería pensar en el campeonato, y no tomar riesgos, dejando que Marco Bulacia se llevase el rallye. Era algo lógico, puesto que su mayor rival en la lucha por el título, José Luís Peláez, se había quedado fuera de carrera, y la prioridad de Pons, a pesar de ser el rallye de casa, sigue siendo obtener el título del CERT.
A pesar de esta reflexión, Xevi Pons arrancaba la tarde marcando el mejor crono, recortando 5,8 segundos a Marco Bulacia, que se mantenía al frente de la general. Daniel Alonso recortaba también diferencias, marcando el tercer mejor crono, a 18 segundos de Pons, recortando 3,2 segundos a Josep Basols, que debía conformarse con la cuarta plaza. En la lucha de los N5, Javier Pardo marcaba el quinto mejor crono, a 38,3 segundos, mientras que Efrén Llarena sufría un pinchazo dejándose 58,2 segundos, lo que permitía a Jorge del Cid subir a la sexta plaza de la general, aunque con el piloto burgalés a tan solo 9 décimas de segundo. A pesar de todo, del Cid iba a tener que retirarse debido a un toque que sufría en la última curva de la especial, en el que se salía la correa del alternador. El piloto vasco lograba cruzar la meta, pero debía abandonar poco después.
Marco Bulacia respondía al piloto catalán en el siguiente tramo, marcando el mejor crono, con 11,2 segundos de ventaja con respecto a Xevi Pons, lo que llevaba la ventaja del boliviano a los 15,9 segundos, que, con solo dos tramos por disputarse, parecían insalvables. También se encargaba de poner las cosas en su sitio Josep Basols en la lucha por el tercer escalón del podio, siendo tercero a 19,7 segundos. Cuarto en esta especial sería Javier Pardo, a 20,7 segundos, que se imponía de nuevo a Efrén Llarena, quinto en el tramo a 24,7, y quinto también en la general, gracias al abandono de del Cid.
El último bucle se presentaba como un mero trámite dada la diferencia que había conseguido Marquito Bulacia en el tramo anterior, pero en el penúltimo tramo, un Gorka Eizmendi que no encontraba el ritmo en toda la jornada, hacía varios trompos, siendo alcanzado en la especial por el boliviano, que perdía 13,3 segundos en la nube de polvo del piloto vasco. Xevi Pons marcaba el mejor crono, aunque Bulacia se mantenía al frente de la general, con tan solo 2,6 segundos de ventaja. En la lucha por el tercer escalón del podio, Josep Basols se hacía con el segundo mejor crono, a solo 3,4 segundos de Pons, con Daniel Alonso tercero a 3,7. Por detrás, Efrén Llarena ganaba la partida entre los N5, quedándose a 17,2 segundos del mejor crono, mientras que Javier Pardo era 3 décimas de segundo más lento.
Se llegaba así al último tramo con todo por decidir, aunque ya a mitad de tramo, y con los tiempos que tomábamos a pie de cuneta, veíamos que Xevi Pons seguía con su máxima de no tomar riesgos. En ese punto, Marco Bulacia ya venía 5 segundos por delante de Pons. Por si fuera poco, el de Manlleu iba a sufrir un pinchazo en la parte final del tramo, que le hacía perder 55 segundos, y con ellos todas las opciones de victoria. A pesar de todo, Pons mantenía sin problemas la segunda posición de la general. Josep Basols marcaba el segundo mejor crono en este último tramo, asegurándose así el tercer escalón del podio, mientras que Daniel Alonso se conformaba con el cuarto mejor crono, justo por detrás de Javier Pardo, que certificaba así su posición dominante entre los N5.
Finalmente, Marco Bulacia y Fabian Cretu se llevaban la victoria en el Rallye de Cervera, su primera participación en el CERT, con 1:13,1 de ventaja con respecto a Xevi Pons y Diego Sanjuán que finalizaban segundos, y 2:00,1 sobre Josep Basols y Xavier Amigo, que completaban el podio. El cuarto puesto era para Daniel Alonso y Cándido Carrera, que finalizaban a 2:25 del vencedor, mientras que Javier Pardo y Adrián Pérez eran quintos, y primeros de la categoría N5, a 3:15,9. Sexto lugar para Efrén Llarena y Sara Fernández, a 4:08,6, mientras que la séptima posición, y la victoria en la Mitsubishi EVO Cup era para Juan Carlos Quintana y Rogelio Peñate, que finalizaban la prueba a 5:54,3. Octavo puesto para Albert Orriols y Lluis Pujolar a 6:19, mientras que novenos eran Xavier Doménech y Axel Coronado a 6:26,6, y completaban el top ten Eduard Pons y Dani Muntadas, a 7:50,1.
Llarena sin oposición en la Copa N5 de RMC
Poca historia iba a tener la primera prueba de la Copa N5 de RMC Motorsport. Efrén Llarena dominaba la copa sin ningún tipo de oposición, siendo el más rápido en todos y cada uno de los tramos, sin importar el pinchazo que sufría el piloto burgalés. Fran Cima le seguía muy de lejos, terminando el asturiano la prueba a 5:44,1 del ganador. Quizás lo más reseñable fuera la emotiva despedida de Juan Carlos Aguado, que disputaba la que a priori será la última prueba de su carrera deportiva, y que terminaba con una tercera posición con remontada incluida, después de una mañana en la que un pinchazo, un error en el display del coche, y la rotura de la palanca de cambios, le hacían ceder mucho terreno.
Dos Ruedas Motrices
Aritz Iriondo lograba una complicada victoria en el apartado de Dos Ruedas Motrices, y es que, aunque el piloto vasco era el que más scratch marcaba, la jornada se le iba a complicar debido a una penalización de un minuto, por adelantarse en un control horario. Iriondo era el más rápido en el primer tramo de la mañana, con medio minuto de ventaja sobre su más inmediato perseguidor, Manuel Gómez Manzanilla, al que seguían Jordi Nualart, que volvía al CERT 9 años después, y Antonio Otero. El resto de la mañana, el piloto vasco se dedicaba a medir sus esfuerzos, lo que permitía a Manzanilla darle caza, quedando Nualart relegado a la tercera posición, mientras que Otero caía hasta la quinta, tras verse superado por el BMW de Juan Carlos Fernández, líder de la Copa Propulsión. A pesar de todo, Iriondo marcaba el mejor tiempo en el último tramo de la mañana, el TC Plus, recibiendo así el punto extra que había en juego.
El primer tramo de la tarde iba a devolver todo al comienzo. Aritz Iriondo era el más rápido, con diferencia, pero recibía la penalización que comentábamos antes, y, aunque se mantenía líder, tan solo tenía 3 segundos de ventaja. Por detrás, Jordi Nualart aprovechaba un pinchazo de Manuel Gómez Manzanilla para situarse segundo, aunque Manzanilla estaba a tan solo 3 segundos del catalán. Iriondo no iba a dar más oportunidades, siendo el más rápido en todos los tramos de la tarde, lo que le llevaba a conseguir una importante victoria de cara a sus aspiraciones en el campeonato. Por detrás, Manuel Gómez Manzanilla imponía su experiencia sobre la de Jordi Nualart, algo falto de ritmo, siendo ambos segundo y tercero respectivamente. Por su parte, Antonio Otero iba a sufrir problemas mecánicos en el último tramo, cuando marchaba quinto. Con la ayuda de algunos aficionados, Otero cruzaba la meta del tramo, y lograba llegar con muchas dificultades al parque cerrado final, aunque solo podía ser decimosexto.
Gabeiras extiende su dominio en la Swift Júnior
Sexta prueba de la temporada, y sexta victoria para Iago Gabeiras entre los pilotos júnior de la Copa Suzuki Swift, aunque no fue un trabajo fácil. Gabeiras iba a sufrir problemas de frenos durante toda la prueba, que le impedían rodar cómodo durante todo el rallye. A pesar de todo, el piloto gallego lograba imponerse por unos exiguos 5 segundos a Sergio Cuesta, que finalizaba segundo, con Aritz Badiola completando el podio, por delante de José Manuel Lamela, que finalizaba cuarto.
Guerra se impone en la Copa Kobe Motor
Dominio casi absoluto de Kevin Guerra en la Copa Kobe Motor, donde marcaba todos los scratch, excepto uno, consiguiendo el piloto canario una victoria que le mete de lleno en la lucha por el título, toda vez que el hasta ahora líder de la copa, Francisco Montes, no pasaba de la séptima posición. Por detrás de Guerra, Sergio Hernández y Antonio Acosta se enzarzaban en una interesante pelea por los dos escalones restantes en el podio. Aunque Acosta comenzaba por delante, la mañana iba a estar dominada por Hernández, mientras que, en los tramos de la tarde, Acosta recuperaba el tiempo perdido, teniendo casi en su mano la segunda plaza. Pero en el último tramo, una piedra dañaba el cárter del vehículo de Acosta, dejándole fuera de carrera, lo que dejaba a Hernández la segunda posición en bandeja, y permitía a Jonathan Gómez subir al tercer escalón del podio.
Dani Solá calienta motores con un Buggie
Poco después de conocerse la presencia de Dani Solá en varias pruebas del nacional de asfalto, el de Vic se enfundaba el casco para disputar el Rallye de Cervera a los mandos de un espectacular Buggie, concretamente un Can-Am Maverick. Se trata de un vehículo capaz de hacer el 0-100km/h en 4,4 segundos, con un motor Rotax ACE turboalimentado de 172 caballos, y que no dejó indiferente a nadie. Dos vehículos más se unían a Solá en Cervera, en manos de Jesús Cucharera, y Ferran Fornell, aunque Solá sería finalmente el más rápido, haciendo un crono que le habría llevado a la undécima posición de la general. Además, estos vehículos también estarán presentes en el Rallye de Granada, donde la organización está ofreciendo incluso premios en metálico para ellos.