La localidad pontevedresa de Lalín acoge la 26ª edición del Rallye do Cocido, que será el escenario en el que arranque la Copa de España de Rallies de Asfalto. Con un calendario que se decanta muy mayoritariamente por el norte peninsular, la presencia de equipos de fuera de esta zona del país es casi testimonial, al menos en lo que a la lucha por la victoria se refiere.
Con un recorrido de 367 kilómetros, de los cuales 111 serán cronometrados, la Escudería Lalín-Deza nos propone un formato para esta 26ª edición de la prueba, en la que en la tarde del viernes se disputará el Shakedown, y el tramo de clasificación, mientras que toda la competición se disputará en la jornada del sábado, con un total de 11 tramos cronometrados.
En lo que respecta a la climatología, la lluvia está prácticamente asegurada, y en cantidad. Las previsiones más optimistas hablan de un 95% de probabilidades de lluvia durante el viernes, y un 85% durante el sábado. Mientras que otras previsiones dan por segura la lluvia el viernes, y no bajan del 90% para el sábado. Las temperaturas serán frescas, con mínimas en torno a 3 grados centígrados, y máximas que a duras penas subirán de los 10.
No podemos dejar de recordar, con estas previsiones, la edición de 2018, en la que algunos tramos se parecían más a un río que a una carretera. Una prueba dura, que será el punto de partida de una Copa de España de Rallies de Asfalto en la que encontramos un total de 38 equipos inscritos, de los 82 que tomarán la salida, si contamos la categoría Legend.
El campeonato nacional gallego
La CERA se convierte en este Rallye do Cocido en poco más que un campeonato nacional gallego. De los 13 equipos que toman la salida dentro de la categoría 1 (básicamente Rallye2, N5, GTR, y N+), tan solo Óscar Palacio, y Alberto Monarri provienen de fuera de Galicia.
Precisamente uno de los pilotos “extranjeros”, Óscar Palacio, llega al Rallye do Cocido con la clara intención de defender el título de la CERA, y repetir la victoria que ya logró la pasada temporada. Pocos cambios para Palacio, más allá de los visuales con la nueva imagen del equipo Recalvi. El asturiano volverá a contar con el Ford Fiesta Rallye2 con el que logró la victoria en la pasada edición, con el que tratará de revalidar el título.
Sergio Vallejo volverá a ponerse a los mandos del Porsche 911 GT3 2010. El de Meira tratará de revalidar su título entre los GT de la CERA, aunque con las previsiones meteorológicas le será realmente complicado plantearse volver a subir al podio, tal y como hizo la pasada temporada.
Otro de los aspirantes al podio será Jorge Pérez Oliveira, que volverá a subirse al Skoda Fabia R5, para tratar de repetir en el podio del Cocido. Esta temporada los rivales parecen haberse multiplicado, pero la constancia de Pérez Oliveira podría darle la opción de ocupar uno de los ansiados lugares de honor de esta primera cita de la CERA.
Una de las novedades de esta temporada será la presencia de Alberto Monarri con el Citroën C3 Rallye2 de Terra Training. Tras sus dos participaciones en las dos primeras citas del ERC con Suzuki, el piloto madrileño se subirá por primera vez a un vehículo con las últimas evoluciones de los Rallye2, lo que le convierte en un firme candidato a la lucha por la victoria.
Otro de los aspirantes a la victoria en este Rallye do Cocido será Víctor Senra con su Skoda Fabia Rallye2. Será la cuarta vez que Senra dispute esta cita, en la que logró la victoria en 2017, en la única temporada en la que ha competido con una montura capaz de pelear por los puestos de cabeza. Además, desde que el piloto gallego se subió a la montura checa, su peor resultado ha sido un cuarto puesto en el Rallye de Ferrol de 2020, siendo siempre primero o segundo en el resto de pruebas.
Un acompañamiento de lujo
Que nadie se ofenda por considerar al resto de equipos un acompañamiento en este Rallye do Cocido, pero lo cierto es que, tanto por palmarés, como simplemente por montura, el resto de equipos se encuentran un pequeño paso por detrás. Aún así, el nivel es realmente bueno, y no podemos descartar las sorpresas.
Continuando con las licencias, me vais a permitir que me salte el orden de la lista de inscritos, y comience hablando en este caso de Luís Vilariño, que celebrará en Lalín su rallye número 150. Una cifra más que respetable, si tenemos en cuenta que incluye una prolífica temporada 2021 en la que participó en varias citas del ERC. Vilariño disputará su noveno Rallye do Cocido, una prueba en la que ha logrado tres podios, siendo uno de ellos la victoria que lograba en 2013 con el Mitsubishi Lancer R4.
Junto a Vilariño tendremos pilotos como Francisco Dorado, con su Volkswagen Polo R5, o Alberto Otero con su Hyundai i20 R5. Para Dorado será su segunda participación en la prueba de Lalín, mientras que para Otero esta es una prueba que conoce a la perfección, llegando a ganarla en 2011.
El Skoda Fabia R5 de Félix Macías, y el Volkswagen Polo R5 de Javier Ramos completarán el listado de vehículos Rallye2 de esta edición del Rallye do Cocido. Ambos conocen bien la prueba, y han visitado en alguna ocasión el podio, aunque sus monturas están un punto por detrás de las de los principales aspirantes en este arranque de la CERA.
Álvaro Muñiz defenderá el honor de los N5 en Lalín, contando para esta ocasión con un Peugeot 208 N5. Muñiz dejará así atrás el desagradable episodio de las manguetas de su Ford Fiesta N5 en la temporada 2018. Por su parte, Miguel Ángel Sánchez tratará de romper su racha de 4 abandonos consecutivos a los mandos de su Porsche 911 GT3 2008, en una cita que se antoja complicada para él, debido a la climatología.
Por último, Abel Pampillón estará presente con su Mitsubishi Lancer EVO IX N+. Será la primera vez que Pampillón dispute el Cocido con un vehículo de tracción total, puesto que en las 6 ocasiones anteriores había competido a bordo de su incombustible Citroën C2 GT.
Las Dos Ruedas Motrices no despegan en la CERA
Si obviamos las 13 unidades del Suzuki Swift Sport que aporta la Copa Suzuki Swift, tan solo encontramos 12 vehículos inscritos en el apartado de Dos Ruedas Motrices de la CERA. De ellos, tan solo uno pertenece a una de las nuevas categorías creadas por la FIA, siendo los cuatro R2 que encontramos en la lista de las primeras generaciones de esta categoría.
José Joaquin Rasilla con el Renault Clio Rallye5 buscará coger ritmo de cara a su participación en el Clio Trophy Spain. Por su parte, Óscar Soto y su Ford Fiesta R2 tendrán la vista puesta en reeditar su título en el Desafío Kumho Asfalto.
Miguel Ángel Caeiro se pondrá a los mandos de otra unidad del Ford Fiesta R2, para disputar por segunda vez el Rallye do Cocido. También con una de las unidades fabricadas por M-Sport estará presente Daniel Mariño, para quien será su primera participación en la prueba de la Escudería Lalín-Deza.
La nota discordante entre los R2 la pondrá el Opel ADAM R2 de Adrián Vaqueiro, que afrontará también por primera vez el Rallye Do Cocido, estrenándose además a los mandos del vehículo alemán.
Además, habrá otros vehículos de Dos Ruedas Motrices, destacando la presencia de Fernando Rico con un BMW M3 E36, que a buen seguro dará un buen espectáculo. Jesús Vila con un Suzuki Swift, Manuel Ángel Macías y Roberto Torres con sendos Renault Clio, Ruth Ortega con un Citroën C2, o los históricos Citroën AX Sport y Opel Corsa GSI de Mario López y José Seijo respectivamente completarán el listado.
Arranca la Copa Suzuki Swift
La primera cita de la CERA será también el escenario del arranque de una nueva edición de la Copa Suzuki Swift. La marcha del doble campeón, Diego Ruiloba, deja la monomarca nipona con una enorme variedad de aspirantes. David Cortés, Juan Carlos Fernández, Pablo Pazó, Luís Canales o Diego Félix son los repetidores con más solera. También repetirá Alfredo Sal, esta temporada más centrado en la monomarca nipona. También veremos el retorno a la monomarca de Sergio Cuesta, así como del dos veces subcampeón de la Suzuki, Alfredo Tamés.
En el apartado de novedades, desde el Clio Trophy llegará José Alvarez. Tras hacer el regional cántabro con un Suzuki Swift de la generación anterior, Diego Campo salta a la Copa nacional, mientras que José Antonio Martínez aparcará su conocido Fiat Seicento para hacer la Swift. Desde las canarias llega Raúl Quesada, mientras que Pere Rovira da el salto desde el regional catalán.
La seguridad sigue siendo prioritaria
Como siempre, la seguridad es uno de los puntos más importantes en cualquier rallye. Situaros en lugares seguros, a ser posible elevados con respecto a la carretera, y evitando siempre las escapatorias de las curvas o cruces. Cuidado también con los cambios de rasante, en los que es más fácil que los coches pierdan el control. En caso de lluvia, es conveniente aumentar sensiblemente las precauciones, ya que es más fácil que un coche pierda el control, y más complicado para el piloto detenerlo.
Llevad siempre con vosotros una pequeña bolsa en la que poder tirar cualquier desperdicio, y dejad la zona en la que disfrutéis de los tramos tan limpia como sea posible. Planificad bien los desplazamientos, sin prisas, y teniendo en cuenta siempre que debéis aparcar vuestro vehículo correctamente. No cortéis ningún camino o carretera que puedan ser utilizados como vía de evacuación, y dejad vía libre para la salida del resto de aficionados. Nos vemos en las cunetas
