Ya dije en el previo del Rallye de Ourense, que esta edición iba a ser algo distinta, al menos en lo que se refería a la climatología. Si a ello le sumamos el retorno de Miguel Fuster a los Súper 1600, y que Iván Ares afrontaba probablemente su última prueba con el Porsche 911 GT3 2008, estaba claro que los rivales del alicantino iban a tomar todos los riesgos necesarios para recortar diferencias en la clasificación general del campeonato. Pero los caprichos de la lluvia, y los problemas mecánicos iban a dar muchas sorpresas.
Todo arrancaba el viernes por la tarde, con la celebración del tramo del Poligono Industrial de San Cibrao, donde las diferencias serían mínimas en todos los casos. Pero si un piloto destacaba en esta especial, este iba a ser Sergio Vallejo, que marcaba el mejor crono, consiguiendo un pequeño colchón de 3 segundos en un tramo de tan solo 1,8 kilómetros. Ivan Ares era segundo, por delante de Cristián García, Daniel Marban, Alberto Hevia, Iago Caamaño, Miguel Paredes, Álvaro Muñiz, Esteban Vallín y Miguel Fuster, que cerraba el top ten en esta primera especial. Cabe destacar el buen crono de Vallín, que con el Opel ADAM R2 superaba tanto a Fuster como a Gorka Antxustegi con los Suzuki Swift S1600.
Pero las cosas importantes iban a esperar hasta la jornada del sábado. Una jornada que arrancaba con dos pasadas por los tramos de Cañón do Sil y San Pedro de Rocas, es decir, cerca de 60 kilómetros cronometrados sin asistencia, que iban a ser decisivos. Pedro Burgo era el primero en dar un golpe sobre la mesa, consiguiendo el mejor crono en el Cañón do Sil, aunque no podía situarse al frente de la general debido a una penalización de diez segundos por haber salido antes de tiempo. El líder seguía siendo Sergio Vallejo, que se dejaba 8 segundos respecto a Burgo, mientras que Iván Ares se situaba tercero. Algo más descolgado se situaba Cristián García en la cuarta plaza, ya a casi 40 segundos del líder, mientras que la sorpresa la encontrábamos en la cuarta plaza, con un Miguel Fuster que sacaba la quintaesencia del viejo Suzuki Swift S1600. El alicantino no solo se situaba quinto de la general, si no que, además, superaba a los dos Swift S1600 modernos, pilotados por Alberto Hevia, sexto, y Gorka Antxustegi, séptimo.
Si en el primer tramo empezábamos a ver sorpresas, en el segundo iba a haber aún más sorpresas. Pedro Burgo no tomaba la salida, puesto que detectaba un problema con una rótula en su Porsche 911 GT3 2010. No le iban a ir mucho mejor las cosas a Sergio Vallejo, que si lograba comenzar el tramo, pero se iba a dejar 5 minutos debido a un pinchazo, lo que le mandaba directo a la decimonovena posición de la general, y le dejaba sin opciones de luchar por la victoria. Así las cosas, Iván Ares se ponía al frente de la general, consiguiendo el mejor crono en este segundo tramo, con una ventaja de 54 segundos respecto a Cristián García, que se situaba en segunda posición con el Mitsubishi Lancer EVO X. El tercer puesto lo ocupaba Alberto Hevia, que mantenía una intensa lucha con Gorka Antxustegi, del que tan solo le separaba un segundo, mientras que Daniel Marban se mantenía en un digno quinto puesto, por delante de Miguel Fuster. El alicantino no había conseguido un buen tiempo, pero aún quedaba mucho rallye por delante.
A partir de ese momento, el rallye cambiaba por completo. Iván Ares se dedicaba a controlar la distancia sobre sus rivales, planteando una prueba a la defensiva, sobretodo respecto a Cristián García. El de RMC Motorsport superaba en los dos siguientes tramos al gallego, aunque las diferencias eran mínimas, y la distancia de Ares al frente de la general seguía siendo más que suficiente. Por su parte, Sergio Vallejo pasaba al ataque, en busca de una complicada remontada que le llevaba a conseguir el mejor crono en la segunda pasada por los dos tramos de la mañana. Vallejo subía así hasta la sexta plaza, con el punto de mira puesto en un Miguel Fuster que marchaba quinto, a un minuto de Alberto Hevia, que se había visto superado por Gorka Antxustegi, quien pasaba a ocupar la tercera posición provisional.
Todos miraban al cielo en la asistencia de mediodía. La lluvia descargaba sobre Orense, pero en la zona de los tramos, la historia era algo distinta. Las nubes amenazaban, pero no terminaban de descargar nada más allá de unas pequeñas gotas que no llegaban a humedecer el asfalto. Cada equipo hacía su apuesta con los neumáticos, y llegaba la hora de partir hacia los tramos de A Peroxa y Toén. Ambos estaban secos en ese momento, lo que condicionaba la decisión de algunos de los primeros espadas de esta prueba, pero justo cinco minutos antes de que Miguel Fuster, con el número 1, tomase la salida en A Peroxa, comenzaba a llover con fuerza.
En estas complicadas condiciones, los tiempos se convertían en una lotería en la que Iván Ares había comprado muchas papeletas. Ares se llevaba el premio gordo consistente en un scratch, y 40 segundos más de ventaja respecto a Miguel Fuster, que era el segundo en la especial. El piloto alicantino también jugaba en esta particular lotería, consiguiendo un segundo premio muy jugoso, puesto que se alzaba con la tercera plaza al superar a Alberto Hevia, y Gorka Antxustegi. El piloto vasco era el que salía peor parado, puesto que iba a sufrir una salida de pista en la que cedía más de media hora, y que terminaría por obligarle a abandonar. Tampoco tenía buenos números Cristian García, que tenía un toque en la parte trasera de su Mitsubishi Lancer EVO X.
Si A Peroxa estaba complicado, Toén no iba a ser menos. Sus primeros kilómetros estaban completamente secos, pero el agua caía con fuerza en su segunda parte. Sergio Vallejo parecía despertar de su letargo en la anterior especial, y marcaba el mejor crono, lo que le permitía superar a Miguel Fuster en la general, y subir hasta la tercera plaza. Iván Ares continuaba con su táctica conservadora, vigilando a Cristián García, que a pesar de los problemas se mantenía segundo. Fuster bajaba al cuarto lugar, aunque Alberto Hevia se recuperaba, y se quedaba a solo 20 segundos del alicantino, lo que, viendo las diferencias que había entre ambos en las últimas especiales, no era nada definitivo.
El último bucle se presentaba como un mero trámite, aunque la lluvia iba a complicarlo todo. En este caso, en A Peroxa no llovía, pero si lo hacía en Toén y San Cibrao, que sería el encargado de cerrar el rallye. Poco importaba, puesto que Sergio Vallejo se ponía las pilas, y marcaba el mejor crono en las tres últimas especiales. El de Meira teóricamente no se jugaba nada, pero en la practica, su fuerte ritmo final le permitía superar en la general a Cristián García, que veía como el diferencial trasero de su Mitsubishi comenzaba a fallar, probablemente a raíz del golpe sufrido en el bucle anterior. Iván Ares conseguía su primera victoria en el nacional de asfalto en la que era su primera participación en el Rallye de Ourense. Sergio Vallejo conseguía minimizar los daños al conseguir la segunda plaza in extremis, mientras que Cristián García también conseguía un magnifico tercer puesto, su primer podio en el campeonato, a pesar de los problemas. Miguel Fuster conseguía su jugada perfecta salvando el cuarto puesto, mientras que Alberto Hevia era quinto.
Dos Ruedas Motrices, Copa FIA y Trofeo R2
Ya hemos contado durante toda la crónica la lucha entre los tres Suzuki Swift S1600 oficiales. Finalmente se imponía Miguel Fuster con el viejo Swift homologado por la FIA, demostrando el alicantino que se encuentra en estado de gracia. Además, este resultado es un gran revulsivo para Suzuki, que logra un nuevo doblete en la categoría, aunque el abandono de Gorka Antxustegi no es una buena noticia de cara a las aspiraciones de la marca nipona en el apartado de pilotos, puesto que se complica su victoria final. Hevia ya ha conseguido superar a Antxustegi en la general, aunque por el momento las diferencias no son excesivas.
En la Copa FIA, el ganador también era Miguel Fuster, aunque la lucha interesante se producía en el segundo puesto de esta Copa, que coincidía, como suele ocurrir en las últimas pruebas con la pelea por el Trofeo R2. Miguel Paredes sorprendía a todos en el tramo espectáculo de San Cibrao del viernes, consiguiendo el mejor tiempo, por delante de Esteban Vallín. Las cosas volverían pronto a la normalidad, con Fuster escapándose al frente de la general ya en el primer tramo del sábado, aunque pronto aparecía un inesperado invitado a la fiesta. Víctor Senra se ponía líder entre los R2, pero Pablo Pazó se situaba segundo a menos de dos segundos, mientras que Vallín se conformaba con la tercera plaza a solo 7 segundos. La segunda pasada por los tramos de la mañana permitía a Senra ampliar ligeramente su ventaja al frente de la general, aunque Pazó se mantenía a solo 6 segundos con el viejo Ford Fiesta R2. Tercero era de nuevo Vallín con el pequeño Opel ADAM R2. Quien decía adiós al rallye era Miguel Paredes, que sufría una salida de pista con su Renault Clio R3 cuando marchaba tercero entre los vehículos FIA.
Ya por la tarde, la lluvia iba a ser la gran protagonista. Víctor Senra llegaba a A Peroxa como líder, pero cuando comenzaba a llover, el del Peugeot 208 R2 tomaba la decisión de cambiar las gomas. Eso significaba penalizar un minuto, y con las prisas, piloto y copiloto dudaban sobre si habían apretado correctamente las ruedas, por lo que afrontaban el tramo con muchas dudas, y completamente desconcentrados, lo que les hacía perder el liderato, y la ventaja que podría haberles dado el cambio de neumáticos. Pablo Pazó se situaba al frente de la general, mientras que Esteban Vallín se situaba segundo, recortando ligeramente las distancias en el primer paso por Toén.
Todo estaba por decidir en el último bucle. Pablo Pazó era el líder, a pesar de contar con el R2 más veterano, y, sobre el papel, el menos competitivo. Quizás por eso el piloto vigués continuaba atacando al máximo en el último bucle, lo que le llevaba a cometer un error que terminaba con el Ford Fiesta fuera de pista, y obligándole a abandonar después de haber realizado un rallye esplendido. Esteban Vallín heredaba el liderato en ese mismo momento, contando con más de 3 minutos de ventaja sobre Víctor Senra, que había remontado hasta el segundo puesto entre los R2, y tercero entre los vehículos FIA. Vallín no tomaba riesgos, y conseguía finalmente la victoria en el Trofeo R2, y el segundo puesto en la Copa FIA, mientras que Víctor Senra era segundo y tercero respectivamente en cada una de las copas. El tercer puesto entre los R2 quedaba en manos de Marcos Canedo, que con el Citroën C2 R2 conseguía muy buenos tiempos, mientras que cuarto finalizaba José Luís Peláez, quinto en la Copa FIA, por delante de Fran Cima, que se conformaba con el sexto puesto entre los vehículos FIA, aunque conseguía la victoria en la categoría R3, y en el Trofeo Ibérico Clio R3T, su principal objetivo esta temporada.
Copa Suzuki Swift
Una vez más, la Copa Suzuki Swift conseguía demostrar que la igualdad mecánica nos permite ver un gran espectáculo en los tramos. Todo comenzaba en el tramo espectáculo del viernes, donde Fernando Rico marcaba el mejor crono, aunque la diferencia entre todos los participantes era de menos de 7 segundos. Pero en la jornada del sábado David Cortes iba a marcar el ritmo desde el primer tramo. Cortes se ponía líder en la primera pasada por el Cañón do Sil, y en la segunda pasada por el mítico Cañón apuntalaba su victoria consiguiendo 10 segundos más de ventaja sobre Adrián Díaz, que quedaba como principal perseguidor a 22 segundos.
Tras la neutralización de la segunda pasada por San Pedro de Rocas, David Cortes parecía asestar el golpe definitivo en la primera pasada por A Peroxa, mientras que Adrián Díaz no conseguía neutralizar el ritmo del piloto orensano. Pero en la segunda pasada por Toén, Cortes se equivocaba en la monta de neumáticos, y cedía toda su ventaja. Díaz recortaba distancias hasta quedarse a tan solo 3 segundos de Cortes, y con tan solo los 1,8 kilómetros de San Cibrao por delante. Cortes no estaba dispuesto a perder una victoria que había trabajado durante toda la jornada, y conseguía marcar el mejor crono, llevándose además su primera victoria. Adrián Díaz debía conformarse con la segunda plaza, mientras que Alberto Otero completaba el podio en tercera posición.
Trofeo ASR – Kumho Nacional
Javier Andrade dominaba el Trofeo ASR – Kumho Nacional de principio a fin, marcando el mejor tiempo en todos y cada uno de los tramos disputados. Andrade no daba opciones a Santiago Martínez, que finalizaba segundo. Ambos ocupan también la primera y segunda plaza de la general del Trofeo ASR – Kumho Nacional tras el Rallye de Ourense, que se decidirá a mediados de agosto en el Rallye de Ferrol.