La vuelta al cole del Campeonato de España de Rallies de Tierra se producía este fin de semana en Cervera, con una prueba que siempre nos da muchas sorpresas, con los pilotos locales metiéndose en la pelea por los primeros puestos, y restando puntos a unos y a otros en un momento importante del campeonato. Por si la dureza de los tramos catalanes no era suficiente, esta temporada las temperaturas iban a ser también protagonistas, con temperaturas realmente altas, que se traducían en problemas para algunos equipos, en forma de golpes de calor, que llevaban a abandonar a las primeras de cambio a Gorka Eizmendi, cuando al terminar el primer tramo, su copiloto, Haritz Olasagasti, sufría las consecuencias del intenso calor.
Pero hay que comenzar haciendo un aparte para hablar de un error que tenía la organización al comienzo de la prueba, y es que, mientras la salida del primer participante estaba prevista para las 9.18 horas, a pie de tramo, veíamos como los radios comenzaban a situarse en sus puestos a las 9.10, lo que hacía completamente imposible que la prueba comenzase a su hora. Esto provocaba un retraso de entorno a media hora, que se arrastraba durante toda la jornada, lo que unido a las neutralizaciones que había por la mañana, hacía difícil seguir el horario del rallye. Además, por la tarde, con los pilotos del Open de Cataluña de rallies, veíamos como los tramos apenas se detenían entre una pasada y otra, con la caravana de seguridad apelotonándose al final de las especiales. Un detalle a cuidar para futuras ediciones.
Y arrancó la prueba
Así pues, a pesar del retraso, el Rallye de Cervera se ponía en marcha, con los dos tramos más largos de la jornada, con 16, y 16,1 kilómetros respectivamente. En ambos tramos, Alex Villanueva marcaba el mejor crono a los mandos de su Citroën DS3 R5 Proto (a pesar de lo que aparecía en la lista de inscritos, el propio Villanueva nos confirmaba en el parque de salida que participaba con la brida grande). En el primero de los tramos, Villanueva metía 20 segundos a su más inmediato perseguidor, Jorge del Cid, que se veía muy perjudicado al meterse en la estela de polvo de Gorka Eizmendi, que salía justo por delante de él. Prueba de este perjuicio es que, en el segundo tramo, del Cid volvía a ser segundo, y tras el abandono de Eizmendi, se quedaba a solo 8,6 segundos del crono de Villanueva. Una vez más, los pilotos locales se metían en la lucha por el podio desde los primeros compases de carrera, con Josep María Membrado siendo tercero en la primera especial, aunque en el siguiente tramo se vería superado por Josep Basols, manteniendo ambos una bonita lucha por el tercer puesto, aún cerca del segundo clasificado.
Por detrás del grupo de cabeza, Xavier Doménech se situaba quinto en el primer tramo, pero el líder del regional catalán, Xavi Vidales marcaba un gran tiempo en la segunda especial, pasando a ocupar esa quinta plaza de la general, por delante del propio Doménech, y de un Juan Pablo Castro que debía controlar los envites de Marcos González y Eduard Fores. En el lado de los abandonos, destacar los de Gorka Ezimendi, como decíamos por los problemas de salud de su copiloto, y el de Hugo Navas, que rompía un palier en el primer tramo. Tampoco continuaba en carrera Miquel Prat, con el Mitsubishi Colt Proto, que sufría problemas mecánicos.
Pero pronto llegarían las sorpresas, y es que en la segunda pasada, pronto empezaba a correr el rumor de que Alex Villanueva estaba sufriendo problemas de temperatura. Más tarde, nos enteraríamos de lo ocurrido realmente, y es que el piloto madrileño tocaba con la parte trasera de su Citroën DS3 R5 en una piedra, rompiendo una bieleta, y dejando la rueda completamente doblada. Esto hacía el coche muy difícil de pilotar, y en una curva no conseguiría girar el coche, tocando otra piedra con el radiador, por lo que perdía agua, y de ahí los problemas de temperatura. A pesar de todo, Villanueva se sobreponía que surgían en el primero de los tramos del bucle, y lograba completar la siguiente especial, llegando a la asistencia larga del mediodía, donde su equipo se empleaba a fondo para permitirle continuar en carrera. En todo el lance, Villanueva se dejaba en torno a 7 minutos, cayendo hasta la vigésima posición de la general.
Los problemas de Villanueva dejaban a Jorge del Cid en cabeza de la prueba, aunque el más rápido en el tercer tramo sería Josep María Membrado, consiguiendo así ponerse en segundo lugar, al superar a Josep Basols, que cedía 10 segundos. Del Cid sería el más rápido en el último tramo de la mañana, en el que Membrado tendría un pinchazo. A pesar de todo, el catalán tendría suerte, y el pinchazo se producía al final del tramo, por lo que la pérdida de tiempo sería de tan solo 14 segundos. Basols aprovechaba la circunstancia para recuperar la segunda plaza, aunque en su intento por recortar distancias, también tendría un pequeño toque en la trasera de su Citroën DS3 R5, con consecuencias meramente estéticas.
Se llegaba así al ecuador del Rallye de Cervera, con Jorge del Cid en cabeza de la prueba, con 19,2 segundos de ventaja con respecto a Josep Basols, segundo clasificado, y 28,6 respecto a Josep María Membrado, que era tercero. Cuarto marchaba Marcos González, a 1:22 del líder, seguido de Eduard Fores, que era quinto a 2:08,8, liderando, además, el Grupo N. La sexta posición era para Willy Villanueva, a 2:09,2, mientras que séptimo se situaba Xavier Doménech a 2:48,1, octavo era Jesús García a 3:00,4, noveno Carlos Aldecoa a 3:02,1, y décimo marchaba Juan Carlos Quintana a 3:25,4. Por su parte, Alex Villanueva caía hasta la vigésima posición, a 6:32,4 del líder.
Después de los problemas de la mañana, y el arduo trabajo realizado por los mecánicos en la asistencia, Alex Villanueva arrancaba la tarde marcando el mejor crono en la primera pasada por los dos tramos que conformaban el bucle de la tarde, lo que le servía para subir tres puestos en la general, hasta la decimoséptima plaza. En la lucha por el podio, Jorge del Cid aumentaba su ventaja al frente de la general hasta los 23 segundos, controlando en todo momento los intentos de recortar distancias de Josep Basols, mientras que Josep María Membrado parecía conformarse con la tercera posición, dejándose casi 20 segundos en la primera pasada por los tramos de la tarde.
El último bucle se convertiría así en un mero trámite, en el que, de nuevo, Alex Villanueva marcaría el mejor crono en ambos tramos. A pesar de todo, el madrileño caería de nuevo a la decimonovena posición, debido a una penalización de 5 minutos. Jorge del Cid se dedicaba a controlar a Josep Basols, firmando así su segunda victoria de la temporada, y la primera junto a su copiloto habitual, Nerea Odriozola, mientras que Basols se mantenía en la segunda plaza, por delante de Josep María Membrado, que sería el encargado de completar el podio. Por detrás, Marcos González conseguía hacerse con la cuarta posición, consiguiendo además la victoria en el apartado Júnior, mientras que Willy Villanueva lograba la quinta plaza in extremis, al superar en el último tramo a Eduard Fores, que sería sexto, y ganador del Grupo N. El top ten de la quinta prueba de la temporada lo completaban Xavier Doménech, Carlos Aldecoa, Javier Pardo, y Xavi Vidales.
Máxima igualdad en Dos Ruedas Motrices
En el apartado de Dos Ruedas Motrices, íbamos a ver una lucha muy interesante hasta al final, que terminaría resolviéndose por un puñado de segundos. Pero antes debemos comentar el prematuro abandono de Rubén Lapuente, que debía marcharse debido a una urgencia familiar antes de tomar la salida. Ya en la jornada del sábado, Javier Pardo comenzaba la jornada con fuerza, anotándose el mejor crono de la categoría en los dos primeros tramos. José Manuel Mora, y Aritz Iriondo, que recordemos que en esta ocasión pilotaba un Peugeot 208 R2, se mostraban como los más directos perseguidores, situándose ambos a 17,9 y 18,1 segundos respectivamente. En cuarto lugar se situaba Josep Anton Doménech con su Citroën DS3 R3T, mientras que quinto era Manuel Gómez Manzanilla, aunque ya a casi un minuto. En cuanto a los abandonos, destacar también el de David Rivas, que se salía de la pista en el primer tramo, y, aunque los daños en el coche no eran excesivos, debían acudir al hospital por algunas molestias. Finalmente, tanto el propio Rivas, como su copiloto, Sergio Pombo, abandonaban el hospital sin consecuencias, aparte de las molestias típicas tras un accidente.
La segunda pasada por los tramos de la mañana sería neutralizada para los pilotos de Dos Ruedas Motrices, debido a distintos incidentes, como el vuelco de Roberto Rozada, o el conato de incendio del coche de Manuel Gómez Manzanilla. El coche del piloto madrileño abordaba el cuarto tramo del día, pero lo hacía con algunos problemas de electrónica, que finalmente terminaban por obligarle a detenerse, con tan mala suerte que el escape tocaba algunas hierbas secas, que comenzaban a arder. Por suerte, y a pesar de que el tramo se neutralizaba para que saliesen los bomberos, el incendio se controlaba a tiempo, y según nos contaba el propio piloto, los daños en el coche eran mínimos.
La emoción llegaría en los tramos de la tarde, que comenzaban con Aritz Iriondo marcando el mejor crono en el primero de los tramos, y restando 14 segundos de una sola tacada a Javier Pardo. El gallego, respondería en el segundo tramo, marcando el scratch de la categoría, pero su ventaja al frente de la general, ahora era de tan solo 11,6 segundos respecto al vasco. José Maunel Mora, por su parte, no podía seguir el ritmo de cabeza, acusando aún su falta de experiencia sobre tierra, aunque conseguía mantenerse en tercera posición de la general.
El último bucle arrancaba con Aritz Iriondo marcando el mejor crono en el penúltimo tramo del rallye. Javier Pardo veía su ventaja reducida a tan solo 8 segundos, y aún quedaba por disputarse el último tramo, el más largo de los dos de la tarde. Iriondo volvía a atacar con todo, exprimiendo el Peugeot 208 R2 de GC Motorsport, y mejoraba en 25 segundos su crono de la primera pasada. Esto ponía las cosas muy difíciles a Pardo, que apretaba los dientes, y aunque no conseguía superar el tiempo del piloto vasco, conseguía mantenerse al frente de la clasificación final, aunque por tan solo 6,3 segundos.
Así pues, en Dos Ruedas Motrices, el ganador era Javier Pardo, seguido a 6,3 segundos por Aritz Iriondo, mientras que José Manuel Mora se conformaba con la tercera posición, a 1:08,9 del vencedor. Cuarto finalizaba Josep Anton Doménech, a 2:52,2, mientras que la quinta plaza en esta dura prueba plagada de abandonos sería para Alex Sabater, a los mandos de su Seat 124, que conseguía además la victoria entre los vehículos históricos.